La sencillez es la nota más alta de esta preciosa boda.
La vuelta a los orígenes, a la tierra, rodeados de los más cercanos, de los más queridos, echando de menos a los que faltaban… Emociones fuertes, duras, intensas pero llenas de amor y de cariño.
El lugar elegido parecía un reducto de calor y paz en medio de un bosque encantado, silvestre, rural, oliendo a pan y flores, lujoso en su más pura sencillez, decía mucho de vosotros, de lo que sois, de lo que sentís.